Sé que hace siglo y medio, más concretamente en Semana Santa, me prometí a mí misma, y a todos los escasos lectores del blog, que publicaría más entradas, pero no ha podido ser. Ya avisé en Septiembre que iba a ser un año muy duro, ya que empezaba 2º de Bachillerato, y que no podría colgar nada apenas. Mezclado con eso, tras la primavera he tenido que enfrentarme a ese gran enemigo subido a la tierra desde el infierno: SELECTIVIDAD. Ése examen que aliena tu vida durante casi un año entero. Pues, por fin, después de tanta literatura empollada, tantos textos traducidos y tanta filosofía atragantada, he pasado por el arco del triunfo. Lo malo es que no creo que me haya salido lo suficientemente bien como para entrar a ninguna carrera guay. Pero ya lo peor ha pasado, alea iacta est, y sólo me queda esperar hasta el viernes para medio-decidir qué hacer con mi futuro.
Mientras, tanto, ¡traigo novedades! Nuevo diseño de blog, esta vez esperemos que permanente (lo que cambiado siempre mucho porque me aburro súper rápido de las cosas), con mi color favorito y una bella imagen que representa la amistad de Tánatos y Perséfone, los dos dioses que han impedido que este año me muera de un ataque. También traeré nueva música, siendo yo tenía que haber algo de música, y quiero que sea, súper happy (como si no existiera en castellano la palabra "feliz"), para que haya buen rollito.
A partir de maña empiezo ya con reseñas de libros (preparaos para Los Héroes del Olimpo I: el Héroe Perdido) y pasado mañana de una película (Mad Max II: el Guerrero de la Carretera). Esperemos que este verano se haga leve y pueda tratar muchos temas.
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