martes, 26 de agosto de 2014

Beso de Vida


Título: Beso de vida
Título original: Kiss of life
Editorial: Molino
Autor: Daniel Waters
Género: Romántica, fantástica, sobrenatural

<<Y pensar que Tommy cree poder cambiar las cosas, marcar la diferencia a través de las palabras y la paz, cuando sus enemigos tienen poder para eliminar todo lo que ha hecho en menos de lo que un corazón vivo tarda en respirar>>.

El fenómeno que ha azotado el país no cesa. Los adolescentes que salieron de sus tumbas siguen aquí y, además, se les unen muertos vivientes cada día. Aunque Phoebe Kendall está viva, se siente tan perdida y sola como sus amigos muertos. Justo cuando se había hecho a la idea de que sentía algo por un zombie (su pareja del baile, Tommy Williams), su amigo Adam muere a causa de un disparo que iba dirigido a ella. Todo se vuelve mucho más confuso cuando Adam regresa de entre los muertos. Ahora Phoebe está dividida entre dos chicos zombis: el que le salvó la vida y el que la necesita para seguir viviendo. 

Pues aquí estamos con la segunda parte de la saga de zombis Generación Dead, algo mejor que la primera.
La narración comienza un mes después de los "incidentes" con los que la anterior entrega da fin y, por lo tanto, con Adam muerto y andando por ahí. Después del tiro que le mete Pete es un zombi. Y eso no es todo porque, aunque el primer libro es narrado enteramente en tercera persona, esta vez tendremos capítulos contados desde el punto de vista de Adam que, como está muerto, veremos joyitas del tipo: <<Muevo más deprisa muevo mejor era babosa y ahora caracol pronto tortuga>>. No debería burlarme del pobre, ¡pero ese momento fue buenísimo! 
También desaparece nuestro "querido" Tommy. Sí, lo pongo entre comillas porque parece que a todos os cae genial, pero a mí no. Piensa que el movimiento de los muertos vivientes no tiene la suficiente fuerza y se lanza a la aventura para ir a Washington y lograr derechos para su comunidad. Ya sabéis que a mí quién me gusta es Pete, el malo. Aunque cada vez me gusta menos. No sé, en el primer libro tenía iniciativa, y aunque era un cabrón, me gustaba. Pero ahora le han condenado a servicios de la comunidad en el centro para personas con Diferente Factor Biótico, ha conocido a Duke y a empezado prácticamente a seguir órdenes. No me gusta cómo va a acabar esto.
Por otro lado, por fin tenemos la oportunidad de salir de Oakvale e ir a ¡Nueva York! Sí, porque ahí han fundado una especie de discoteca zombi a la que nuestras protagonistas irán en un par de ocasiones. La razón por la que me hace tanta ilusión contar esto es porque se llama Aftermath. ¡Como mi disco favorito de los Rolling Stones! Además, se nota que Daniel Waters se sigue currando las localizaciones y la descripción de lugares.
En resumen: esta segunda entrega supera en muchos aspectos a la anterior, no dudéis en seguir la saga si ya la habéis empezado.

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